La casa bioclimática, arquitectura solar pasiva, es la fusión entre los conocimientos adquiridos por la arquitectura tradicional a lo largo de los siglos, y las actuales y más avanzadas técnicas de ahorro energético que tiene como principal objetivo cubrir las necesidades de sus habitantes con el menor gasto energético posible, a la vez que aporta a sus moradores un mayor confort y salubridad.
Para ello, se trata de estudiar a conciencia, tanto el diseño de la edificación como los materiales a utilizar, así como el sistema constructivo, con miras a una edificación ahorradora y muy confortable.
La diferencia entre la arquitectura moderna y la arquitectura solar-bioclimática es que la primera necesita enormes cantidades de energía contaminante para calentarse, enfriarse, iluminarse o calentar agua, etc. mientras que ésta última está integrada en su ambiente, necesita poca energía y ésta la obtiene del medio natural, fundamentalmente del sol y de la tierra.
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